Este pago se tendría que realizar con 600.000 euros en efectivo y la entrega de dos pagarés por valor de 900.000 euros cada uno. Pero Samper cambió las condiciones y exigió el pago de los 600.000 euros antes de la firma del preacuerdo de compraventa, un acto que ha descolocado al grupo de Antonio Perea.
Samper, con el que este periódico no ha podido contactar para confirmar este extremo de la negociación, ha asegurado que no conoce a los empresarios de Singapur pero que sí negocia con Perea. El pasado mes de agosto, de hecho, le confesó a Felipe Coello, concejal de Deportes de Murcia, que la opción Tornel no era finalmente de su agrado pero que tenía otra oferta que podía ser interesante, en alusión a la de Perea y al grupo de Singapur.
El madrileño, según los que le conocen, podría estar, con esta medida de presión, comprobando el verdadero riñón y la capacidad monetaria de los futuros compradores. Algo que va en sintonía con varios de sus lemas desde que el club está en venta: «Quien quiera comprar el Real Murcia, que enseñe la patita».
Ambas partes no han dado por rotas las negociaciones, pero se han emplazado a finales de septiembre. Perea, que asegura que llegará a España esta semana, se entrevistó (en su segundo intento por comprar el Murcia) en julio y agosto con Samper y no quiere romper, de momento, el acuerdo de confidencialidad que ha aceptado para no hacer públicas las negociaciones.
Aportaciones desde Madrid
El grupo de inversores de Singapur que supuestamente quiere hacerse cargo del Real Murcia estaría dispuesto, según fuentes cercanas a la parte compradora, a hacerse cargo de 36 millones de euros del total de los 50,4 que aparecen como deuda total de la entidad grana. La deuda del club es con todo tipo de acreedores, desde empresas privadas y firmas relacionadas con Jesús Samper y su familia, hasta entidades públicas como Hacienda y la Seguridad Social.
Este dato está recogido en el informe de auditora de las cuentas anuales de 2014 (la última realizada hasta el momento) avalado por la firma Grant Thornton, una empresa profesional dedicada a la auditoría y al asesoramiento financiero, fiscal y legal. Un informe que el propio Jesús Samper encargó al final de la pasada temporada y que tiene fecha de noviembre de 2014.
El hecho de que haya casi 14 millones de euros de diferencia entre lo que debe el Real Murcia y de lo que supuestamente se harían cargo los empresarios de Singapur, no rompería la operación a priori, ya que el propio Samper ha manifestado públicamente durante el último año que estaría dispuesto a perdonar todo el dinero que el propio Real Murcia le debe a él y a sus empresas, una cantidad que estaría cercana a los 14 millones de euros.
De hecho, en la contabilidad del club con fecha de junio de 2014 y contenida en este informe de auditoría, el Real Murcia mantiene deudas con empresas del grupo y asociadas por valor de 6,8 millones de euros, procedentes de cantidades que ha tenido que poner Samper para cuadrar las cuentas al final de diversos ejercicios económicos. A eso hay que sumarle lo que ha puesto a través de otras empresas filiales del club grana como Real Murcia Marketing o Real Murcia Medios.
La empresas relacionadas con Samper y su familia aparecieron en 2010 en el listado de acreedores contra la masa (la deuda generada por el club desde su entrada en concurso hasta el alzamiento de este y el inicio del periododo de pagos) y en el listado de acreedores ordinarios. Santa Mónica, 'holding' de diez empresas distribuidas entre España y el continente americano, propiedad de Samper y que recientemente entró en concurso de acreedores, aparece en ambos listados con 2,1 millones por préstamos al Real Murcia, igual que la firma Samper y Asociados, un bufete de abogados dedicado al asesoramiento jurídico, comercial, deportivo y economico-financiero, también propiedad de los Samper, que mantenía en julio de 2010 un derecho de cobro con la entidad de 290.000 euros por sus servicios de asesoramiento legal al club.
En el listado de acreedores también aparecía Gestora Deportiva Murciana S.L, propiedad de Samper, y propietaria del 87,1 del capital social del Real Murcia, que figura como acreedora ordinaria del club por un préstamo de 2,6 millones de euros. Si Jesús Samper cumple su palabra, lo que el Real Murcia le debe a él y sus empresas se quedaría en nada si finalmente llega un nuevo propietario a la entidad. El empresario madrileño siempre le restó importancia a esta deuda y al principio aseguró que estos créditos no se le pagarían hasta que el Real Murcia consiguiera abonar el resto de su deuda a todos los acreedores del concurso.
Segundo intento
El primer acercamiento de Perea al Murcia fue representando, según el mismo, a empresarios de Oriente Medio. De hecho, una vez apareció por Archena con el jeque Sulaiman Al-Fahim, el propietario del Manchester City. «Hice una oferta en junio de 2014. Mi abogado, que conoce muy bien a Samper de la época en la que ambos trabajaban en la Liga, no tuvo problemas en reunirse con él. Le enviamos una oferta de compra con las condiciones. En ese documento estaba muy clara la oferta», dijo en agosto de 2014.
Pero Samper ninguneó su propuesta y no le hizo ningún caso. El archenero, tras mucho insitir, se ha ganado el respeto de Jesús Samper, que ya lo considera públicamente un potencial mediador. Nada que ver con el trato que el propietario del Murcia le dispensó con anterioridad en privado cuando lo bautizó como el 'taxista del jeque'.
Fuente: La Verdad
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