El objetivo de la intervención es implantarle un desfribilador automático -Disfribilador Automático Implantable (DAI)-, un dispositivo similar a un marcapasos que detecta arritmias y taquicardias. En el caso de las taquicardias, si el DAI las detecta, comienza una terapia de estimulación en el ventrículo para controlarlas. Si es una arritmia, se libera una descarga de alta energía para interrumpirla y regresar al ritmo cardiaco normal.
Fuentes sanitarias consultadas por Radio Murcia Cadena SER confirman que, salvo casos muy específicos y concentrados en el deporte de elite norteamericano, la implantación de un DAI es incompatible con la práctica deportiva profesional, por lo que Antonio López colgará las botas tras esta intervención.
Fuente: Cadena SER
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