La tercera ley de Newton dice que toda acción tiene una reacción con la misma fuerza y en sentido opuesto. Y en el Real Murcia este principio de acción-reacción se cumple a rajatabla. Tras los pasos del Consejo de Administración y la entrada de los 500.000 euros en préstamos participativos convertibles en acciones de Agustín Ramos, Mauricio García de la Vega ha presentado una demanda contra esa "tercera ampliación de capital".
En un comunicado, el empresario mexicano explica que todo el que ponga dinero se arriesga a perderlo: "Los inversores en préstamos participativos se arriesgan a perder su dinero, pues estos se basan en una estructura accionarial ficticia". Afirmación no del todo cierta, porque ese dinero pasaría a ser deuda del Murcia y sus dueños acreedores, como en el resto de ampliaciones de capital
De la Vega manifiesta en el comunicado su rechazo ante esta ampliación que, dice, está basada en una "ilegalidad". Además, se muestra perplejo ante las informaciones de que el Consejo quiere promover otra ampliación en la próxima Junta de Accionistas.
El mexicano vuelve a recordar en el comunicado que: "Si la primera ampliación fue nula e Iconos Nacionales seguía ostentando el 84,2% del capital social, cualquiera puede entender que en las sucesivas ampliaciones las consecuencias jurídicas deberán ser idénticas. Por ello, no comprendemos cómo este Consejo liderado por un fedatario público, al que se le supone respeto a la justicia, puede seguir al margen de la Audiencia Provincial e incumpliendo sus obligaciones."
Es más, acusa al Consejo de Administración de "okupar" el Real Murcia: "¿Qué es lo que necesitan para acatar la ley y dejar de 'okupar' el Real Murcia? ¿Que vengan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad a sacarlos del estadio? Los actuales gestores del club perseveran en su intención construir una estructura accionarial ficticia sobre la primera ampliación de capital, creando una obra teatral digna de Calderón; creen que decir muchas veces una mentira acabará convirtiéndola en una verdad, y eso atenta contra los intereses del club, pues es un engaño para accionistas, inversores, afición e incluso los protagonistas en la parcela deportiva, que ninguna responsabilidad tienen en esta situación.
Por ello, exigimos la inmediata dimisión y salida del actual Consejo, para que, en cumplimiento de las sentencias de la justicia, y trabajando desde un plano de legalidad, una nueva estructura acceda a gestionar el club, partiendo, eso sí, desde la cuarta categoría del fútbol español a la que nos han dejado caer. Mientras tanto, seguiremos impugnando todo intento de diluir la participación accionarial que por ley corresponde a Iconos Nacionales".
Fuente: Cadena SER
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