Será el último partido de la primera vuelta ya que una semana más tarde, el 9 o 10 de enero, el equipo murciano volverá a jugar en la Nueva Condomina contra el Marbella en lo que supondrá el arranque de la segunda ronda de la competición, un rival que en el estreno liguero tumbó al Murcia por 3-1. El equipo que preside el millonario ruso Alexander Grinberg arrancó brillantemente la Liga, aunque poco a poco se está desinflando, y de los tres últimos partidos solo ha ganado uno.
En el tercer partido del mes de enero el equipo grana viajará hasta Villanueva de la Serena para medirse al Villanovense, un conjunto que le ha vuelto a tomar el pulso a la competición en el grupo IV de la Segunda B tras dar carpetazo a su experiencia copera ante el Barça. El cuadro extremeño se dejó llevar en la competición regular despistado por su duelo a doble partido contra los blaugranas y hasta llegaron a meterse en posiciones de descenso. Actualmente es decimosexto y ha conseguido no perder en los tres últimos partidos de 2015.
En teoría, y a falta de que lo apruebe la Federación, el cuarto partido del mes de enero tiene que ser el aplazado contra el Granada B. Ambos equipos se han puesto de acuerdo y han pedido oficialmente jugarlo el día 20 de enero, a las 20.00 horas, en Los Cármenes. Lo habitual en casos como éste es que la Federación obligue a los equipos a disputar los partidos aplazados antes de que juegue la primera vuelta. En este caso, la única posible sería jugarlo el próximo 6o 7 de enero. El año pasado, el organismo que preside Villar sí obligó a a Hoya y al San Roque, en un caso similar, a jugar el choque suspendido el 21 de diciembre por una gastroenteritis colectiva de los lorquinos, antes del inicio de la segunda vuelta. Éste se jugó el 7 de enero, antes de que arrancara la segunda parte de la competición.
Para cerrar un mes muy cargado de actividad, el Real Murcia tiene que recibir precisamente a La Hoya en casa, en un partido que tendrá morbo ya que el Brócoli tiene muchos miembros con pasado grana. Entre ellos el técnico Paco García, que la pasada temporada llevó al Imperial hasta el 'playoff' de ascenso a Segunda B, a Roberto Alarcón, cedido por los granas a los lorquinos, o a Pina, que vivió sus mejores momentos como grana a los órdenes de Clemente, que lo puso hasta de titular en el Santiago Bernabéu.
Para cerrar un mes que puede ser decisivo en lo deportivo y que marcará la verdadera fuerza mental de un grupo de jugadores que han perdido a su presidente a mitad del curso, el Murcia visitará a un Betis B que ha mejorado respecto al del inicio de la Liga y que le ha dejado el puesto de colista al Almería B.
Morillas prepara la báscula
El equipo grana se fue de vacaciones dos días antes de lo previsto y su inactividad, tras el fallecimiento de Jesús Samper, va a durar más de lo previsto. Aún así, Juan José Morillas, el nutricionista del Real Murcia, no varió la dieta de los jugadores para los diez días de parón. La plantilla grana solo podrá salirse de la rutina mañana, día 24, y el resto de días deberá vencer a la tentación.
Cinco comidas al día y menos cantidad dado que no habrá gasto calórico ante la ausencia de entrenamientos. Ésa es la instrucción. Desayuno con tostada y fruta, comida con hidratos como patata, legumbre y arroz, y cenas con predominio de las proteínas. A la vuelta del parón, la báscula de Morillas determinará si alguno paga multa.
Fuente: La Verdad
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