Iturra deslumbra a Rafinha

Justo después de que el árbitro pitara el final del partido entre el Real Murcia y el Barcelona B en la Nueva Condomina, Rafinha se fue en busca de Manuel Iturra. El jugador del filial, que está llamado a ser la estrella del fútbol en un futuro muy cercano, entabló una corta conversación con el chileno del equipo grana.

Rafinha le regaló un halago que de su boca tiene aún más importancia: «¿Cómo es posible que no estés jugando en Primera División?», le preguntó al jugador grana, que ha sido 30 veces internacional. Iturra, agradecido, aprovechó la ocasión para pedirle la camiseta, pero en eso no tuvo tanta suerte ya que el jugador del filial le dijo que no podía.

La anécdota la contó el propio Iturra tras el partido del pasado sábado. Se marchó contento del campo. La afición lo quiere, es un jugador clave para el equipo, se ha reencontrado con el fútbol después de unas temporadas a bajo nivel y además tuvo la suerte de dar un gran pase a Chando que lo dejó solo ante el portero del Barcelona B. «El pase fue estupendo y además lo di con la pierna izquierda», comentaba feliz el jugador grana justo antes de abandonar la Nueva Condomina acompañado por su esposa, una periodista argentina, y por su hija.

Iturra ha pasado los dos días de descanso que Iñaki Alonso les dio a su plantilla en Madrid y ayer ya estaba de vuelta al trabajo con el resto de sus compañeros.

«Espero que no se lo lleven antes de tiempo», explica ayer el entrenador grana al preguntarle por la posibilidad de que otros equipos se interesen por el pivote del Real Murcia.

Iñaki Alonso explicó que «Murcia es una gran ciudad, el Real Murcia es un gran club, Iturra se sabe querido por la afición y aquí está volviendo a alcanzar un gran nivel y ha vuelto a tener ilusión».

Para Iñaki Alonso es un jugador fundamental en el equipo y titular indiscutible siempre que no esté sancionado. La acumulación de tarjetas es, por ahora, su único handicap en lo que va de competición.

Iturra no es propiedad del Real Murcia. Los dueños de sus derechos deciden su futuro a través de un fondo de inversión. Ellos verán cuál es el futuro de este jugador a partir del próximo verano, cuando cumpla sus obligaciones con el Real Murcia.

En principio y sobre el papel quedarse con este jugador cuesta 500.000 euros. Esa es la cifra que tendrá que abonar el club que quiera contar con sus servicios para la próxima temporada, aunque como todo en el fútbol, es negociable.

De aquí hasta el final de la temporada aún quedan muchos meses por recorrer. Como el Real Murcia por medio de su presidente, Jesús Samper, ya ha anunciado que no habrá fichajes en el mercado de invierno y que la plantilla será la misma que comenzó la temporada, los miembros del cuerpo técnico tendrán mucho tiempo por delante para planificar la nueva plantilla.

'Chuti' Molina podrá tomar decisiones con tiempo y planificar la nueva plantilla teniendo en cuenta qué interesa y qué no interesa al Real Murcia, qué jugadores tienen futuro y cuáles no, y qué hay en el mercado interesante independientemente de la categoría en la que juegue el Real Murcia.

Si Iturra cumple contrato en junio del año próximo, Cristian García también tiene unos meses importantes por delante para demostrar que se puede quedar en el Real Murcia o bien en el fútbol español. También cumple contrato a final de temporada y en su caso el Real Murcia llevaría una parte importante de una posible compra de sus derechos.

Pero antes de que Molina comience a pensar en la nueva planificación, lo que sucederá en los próximos meses ya que a partir de enero los futbolistas pueden comprometerse con otros clubes, la plantilla continúa con su trabajo diario.

Ayer el equipo entrenó en las instalaciones de Cobatillas tras los dos días de descanso y la derrota contra el Barcelona B ya ha quedado aparcada. Ahora solo el Sabadell está en el horizonte. Puntuar el domingo, a las nueve y media de la noche, y seguir enganchados en los puestos altos de la tabla es lo que cuenta. Con Sutil de baja, la vuelta al equipo de Emilio está asegurada.

Fuente: La Verdad