A cien euros el kilo de más

Con la Navidad a la vuelta de la esquina, el Real Murcia se prepara para afrontar unas largas vacaciones y organizar el plan de trabajo de la plantilla en los días que no hay entrenamientos. Cada jugador se marchará con un plan específico de trabajo, con lo que se recomienda comer y lo que no. Pero desde que Iñaki Alonso se hizo cargo del equipo la pasada temporada ha implantado unos criterios modernos: poco control y más responsabilidad individual.

No habrá prohibicióne en los horarios, no se impondrá un descanso obligatorio. Los futbolistas de la plantilla grana tendrán libre Nochebuena y Nochevieja, podrán cenar tranquilamente, salir por la noche y brindar con champán, pero el día 2 de enero se tendrán que enfrentar a la prueba de la báscula, una analítica y la medición del índice de grasa corporal.

Lo que digan las pruebas será determinante. El que se pase de la raya y llegue con algún kilo de más tendrá que pagar una multa.

Cada jugador del Real Murcia está obligado a tener un índice de grasa que va de los diez a los once puntos. Si después de las vacaciones el índice sube un punto habrá que pasar por caja y dejar cien euros, como mínimo. Si sube dos o tres puntos la fiesta puede llegar a los trescientos euros.

En la primera plantilla del Real Murcia existe una caja común en la que se va metiendo el dinero de las multas por retrasos o por incumplimiento del régimen de disciplina interna puesto por el entrenador. Cuando se reúne una buena cifra ese dinero se usa para pagar las comidas cuando la plantilla se reúne, para comprar algún regalo o pagar alguna de las compras que el equipo necesita para trabajar mejor.

Este año la cuantía de la multa ha subido. La pasada temporada Iñaki Alonso ya dejó libertad a sus jugadores. Optó por no organizar entrenamiento el día 1 de enero por la mañana y por dar a sus futbolistas libre tanto la semana de Navidad, como los días previos y posteriores a Nochevieja. La multa por punto de grasa se fijó en cincuenta euros, pero los futbolistas fueron responsables, se cuidaron y no fue necesario amonestar a nadie, al menos esa es la versión oficial que se da en el equipo.

Esta temporada la filosofía es la misma, pero todo el que se pase tendrá que dejar en la caja común un mínimo de cien euros, justo el doble de lo que se fijó la pasada campaña.

José Antonio Morga, el preparador físico del Murcia, se encargará de poner a cada futbolista un plan de trabajo. Tras el partido contra el Alcoyano, que en principio está previsto para el sábado, 17 de diciembre, a las seis de la tarde, toda la plantilla comenzará las vacaciones y los jugadores se marcharán a sus ciudades de origen para pasar la Navidad con sus respectivas familias. Volverán al trabajo el día 26 de diciembre. Todos menos Cristian García y Manuel Iturra. En el caso de que el primero viaje Argentina y el segundo a Chile, el entrenador Iñaki Alonso les dará más días de permiso por los miles de kilómetros que tendrán que realizar. El lunes 26 comenzará una semana de trabajo hasta el viernes 30. Tras la sesión de entrenamiento otra vez vacaciones para pasar la Nochevieja. El día 31 de diciembre y el 1 de enero hay descanso para retomar el 2 de enero el trabajo y enfrentarse a la báscula y a las pruebas para determinar el estado de forma en el que regresan tras la Navidad y antes del partido del 8 de enero que enfrentará al Real Murcia con el Nástic de Tarragona en el Nou Estadi.

Fuente: La Verdad