Mario Marín, canterano del Real Murcia que normalmente actúa en el lateral derecho, pero que el domingo suplió la baja de Óscar Sánchez en el izquierdo con solvencia, se ha convertido en uno de los jugadores más polivalentes del equipo en la parcela defensiva. El próximo cuatro de abril cumplirá veinte años y su vinculación con el Murcia está firmada hasta 2013, por lo que tiene margen para exhibir todas sus credenciales en la disciplina grana antes de tener que pensar en emigrar de forma apresurada.
Los que lo conocen y lo siguen desde hace años en las categorías inferiores ya hablaban hace tiempo de su valía, pero fue a partir del pasado verano cuando se tomó la decisión por parte del cuerpo técnico de que la Segunda B era una buena categoría para que Marín pasara a ser futbolista de la primera plantilla del Murcia. No está defraudando a nadie, pero tiene delante una serie de condicionantes que le obligan, por ahora, a esperar su turno desde el banquillo. «No tengo todos los minutos que quiero, pero también tengo claro que ya no estoy en el filial y que se está luchando por ascender a Segunda. Yo lo único que puedo hacer es aprovechar las ocasiones y sigo centrado en este aspecto», explicó ayer el defensa de El Raal a esta diario.
El domingo ante el Alcalá suplió en el lateral zurdo al sancionado Óscar Sánchez puesto que Góngora, el otro lateral izquierdo de la plantilla, sigue recuperándose de una lesión. Lo hizo bien sin ser su posición natural, pero teniendo también muy en cuenta que al murciano le faltan minutos de competición para ponerse al nivel de algunos compañeros. Se trata del sexto jugador que menos ha intervenido, ya que acumula esta campaña un total de 361 minutos, pero no es menos cierto que sus apariciones siempre han llegado por indisposición de alguno de los ´intocables´ de Iñaki Alonso, como son los casos de Ander Gago y de Óscar Sánchez, quienes en condiciones normales tienen un puesto de salida asegurado. Marín explicó que «he jugado muchos partidos en el filial como lateral zurdo y no me resulta extraño para nada cambiar de banda».
Gago, el lateral vasco que juega en la misma posición que Mario Marín y que llegó procedente del Lemona, con casi mil setecientos minutos ha sido y sigue siendo el indiscutible para el entrenador desde que comenzó el campeonato. Es una incorporación que solicitó el propio Iñaki Alonso, ya que Gago ha desempeñado toda su carrera en equipos del norte y, con los datos en la mano, ha demostrado bastante oficio aunque a algunos les guste más que a otros. Ahora mismo puede ser entendible que el titular sea Gago, puesto que no ha dejado a nadie en mal lugar con su fichaje, pero a la mínima que se duerma, el público será el primero en hacérselo saber, entre otras cosas, porque uno de la casa viene empujando fuerte y a buen ritmo.
Respecto a la trayectoria del equipo, el joven futbolista de El Raal, quien tampoco profundizó sobre el juego del equipo, dejó claro que «sabíamos que este año iba a ser muy complicado a pesar de que somos un gran equipo». El Murcia no es el mejor líder de los cuatro grupos, pero tiene cincuenta puntos en su casillero que, unido al nivel que reina en la categoría, lo hacen cada jornada más candidato para recuperar en unos meses una plaza en Segunda. «Hemos tenido que visitar, y todavía nos quedan, campos muy difíciles y lo que tenemos que hacer es mantener la línea con buenos resultados en casa y también fuera para seguir en la posición actual», añadió Mario Marín sobre la marcha del equipo.
La temporada se presenta larga y a día de hoy, lo mejor que le puede pasar a Mario Marín es que cumpla con garantías cada vez que lo reclame su entrenador para ser uno de los miembros que forme la plantilla del año que viene, si es posible, en Segunda División, el máximo deseo de la familia murcianista. De todos modos, quedan todavía algunos meses de sopor en esta categoría hasta finales de mayo. Habrá que tirar de paciencia. No queda otra.
Fuente: La Opinión
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