Jesús Samper, dueño del Real Murcia, tendrá que poner sobre la mesa medio millón de euros si quiere pagar la última nómina y las pagas extras de los futbolistas y del personal que trabaja en las oficinas. El club no dispone actualmente de ese dinero ni de ingresos suficientes para hacer frente al pago, por lo que tendrá que ser el propietario de la entidad grana el que haga el desembolso si quiere estar al día en los sueldos antes de finales de julio, según han manifestados fuentes de la entidad grana.
Los próximos días van a ser determinantes para el futuro del Real Murcia. Por una lado se aclarará la situación en la parcela deportiva con la elección del director deportivo y del entrenador, quienes serán los encargados de hacer el nuevo equipo.
Pero aún más importante que la plantilla que debe de sacar al Real Murcia de Segunda B en un año es aclarar y dar un poco de estabilidad a la parcela económica, fundamental para que todo lo demás funcione.
Una año más, el club vuelve a generar déficit. La entidad grana no ha tenido suficientes ingresos para cubrir los gastos en un año que tenía que haber sido de total restricción por la entrada en el concurso de acreedores.
Si Jesús Samper está dispuesto a poner ese dinero de su bolsillo se habrá salvado un primer obstáculo, aunque fuentes cercanas al concurso aseguran que el problema de liquidez que sufre la entidad grana es muy importante, por lo que hay que habilitar fórmulas para que se inyecte dinero. La ampliación de capital puede ser una de ellas. Si finalmente se toma esta decisión, el dinero para suscribir las acciones lo tendrá que poner Samper, o bien volver a sacar títulos de suscripción pública para que los aficionados vuelvan a comprar acciones.
Fuente: La Verdad
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