El Real Murcia, equipo que ayer ganó por 1-0 a Las Palmas, necesita conseguir su cuarto triunfo consecutivo para asegurar su permanencia en Segunda División, una racha que el conjunto grana no logra desde hace 17 meses.
El cuadro murcianista, que ha salido de los puestos de descenso a Segunda B después de haber vencido ayer y en las dos jornadas anteriores al Celta de Vigo por 4-1 y al Elche por 1-2, es el décimo octavo clasificado con 49 puntos sumados en 41 partidos, pero seguramente estará obligado a ganar el sábado en el campo del Girona para certificar la salvación. Perdiendo podría continuar en Segunda, pero es bastante posible que ese resultado e incluso el empate le hiciesen perder la categoría.
En todo caso, la situación del equipo dirigido por José González es privilegiada si se compara con la que tenía tres semanas atrás cuando perdió en Cádiz y estaba a cuatro puntos de las posiciones que daban la permanencia.
La mejor racha de los granas en la temporada, que es la actual, les ha permitido salir del pozo de forma provisional, pero todo hace indicar que para alcanzar su objetivo tendrá que elevarla a cuatro victorias consecutivas, algo que no consigue desde el inicio de la etapa de José Miguel Campos al frente del equipo en la temporada 2008/2009, cuando encadenó cinco victorias.
Entonces, el Murcia se impuso sucesivamente al Alicante (0-2), al Albacete (1-0), al Salamanca (2-3), al Celta (1-0) y al Córdoba (1-0) para ver truncada esa buena dinámica cayendo contra el Rayo Vallecano (0-1).
Fuente: EFE
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