El futuro del Murcia está en casa

El pasado del Real Murcia ha estado marcado por desembolsos astronómicos para fichar futbolistas, plantillas renovadas de principio a fin cada doce meses y fichajes a precios de oro. El resultado ha sido un presente marcado por la bancarrota y el concurso de acreedores. Pero el futuro aún esta por decidir. Y el futuro de los clubes que no tienen o ya han agotado el negocio urbanístico pasa por apostar por los futbolistas de la casa y gastar en pocos futbolistas, pero de calidad, más que la cantidad.

Así lo ve el vicepresidente deportivo del Real Murcia. José Luis Morga ha puesto sobre la mesa del propietario de la entidad, Jesús Samper, un proyecto para diseñar el nuevo Real Murcia basado en tres premisas: mejor relación con los clubes de la Región para que vean en la entidad grana una salida a sus futbolistas, más cuidado de las bases para que lleguen más jugadores al primer equipo y no se fiche cada temporada a una media de veinte futbolistas y la construcción de una ciudad deportiva donde puedan entrenar.

Morga explicó su proyecto en el anterior consejo de administración celebrado en la Nueva Condomina y ahora espera respuesta. En algo menos de un mes conocerá la opinión de Jesús Samper y si hará o no cambios en la estructura de cara a las próximas temporadas.

«Yo sólo he hecho un informe para señalar qué cosas hay que mejorar y qué parcelas se deben reforzar. Lo que yo no digo es qué personas tienen que estar al frente. Eso ha de valorarlo el propietario y decidir en quién confía. No es que sobre nadie en el club, es más cuestión de reorganizar y colocar a cada persona en su sitio», explica Morga.

Actualmente la relación del Real Murcia con los otros equipos de la Región es muy distante. De hecho, no es la primera vez que los responsables del club que trabajan en Murcia han tenido problemas con otros equipos de inferior categoría. Además, la cantera sigue siendo una asignatura pendiente. Morga explica que «es necesario que a partir de ahora no se escapen más futbolistas y se marchen a otros clubes. Tienen que saber que hay un club que cuida de ellos y se interesa por sus problemas y por su situación».

«Para lograrlo, es necesario construir una ciudad deportiva en la que puedan entrenar sin problemas y donde tengan las instalaciones necesarias», continúa explicando. Para Morga la ubicación ideal es el municipio de Sangonera, pero añade que «debe de ser el propietario del club el que elija el sitio». De hecho, el Ayuntamiento de Murcia también ha señalado en varias ocasiones a Sangonera como el sitio idóneo para construir esta instalación.

Según cuentan los responsables del equipo de Segunda B, entre los que se encuentra el concejal José Ros, hace unos meses se pusieron en contacto con Samper para ofrecerle la posibilidad de que ambos equipos tuvieran una relación de colaboración muy estrecha y que se ubicaran alrededor de El Mayayo unas instalaciones deportivas, a lo que Samper, según esa versión, se negó.

El empresario madrileño no está obligado a construir dicha ciudad deportiva ya que en el convenio urbanístico que firmó con el Ayuntamiento de Murcia no lo recoge. En dicho documento sólo hay una mención a estas instalaciones en la que la empresa de Samper reconoce el derecho del Real Murcia a usar las instalaciones que se «prevé desarrollar en el conjunto de la ciudad deportiva».

Hoy por hoy, el primer equipo grana sólo tiene las instalaciones de Cobatillas para entrenar y cuando están en resiembra pide otros campos como los de La Manga Club o Hacienda del Álamo. Los trece equipos que conforman las bases entrenan en campos municipales: Santiago el Mayor, José Barnés y Las Torres de Cotillas y en el de la UMU, por el que el club paga un canon.

Fuente: La Verdad