Uno de los casos más llamativos en la plantilla grana es el de Álvaro
Moreno, un central que llegó a Murcia el pasado verano cedido por la
Ponferradina y cuyas expectativas de triunfar en su tierra están muy
lejos de cumplirse. Aunque desembarcó en el club grana como
contraprestación a la marcha de Chavero y con muchos números para ser
titular, la realidad, después de 17 jornadas de Liga, es que solo ha
jugado seis minutos, saliendo desde el banquillo en los últimos
instantes de los choques ante el Linares y El Ejido, siempre por la
decisión de su entrenador, Paco García, de perder tiempo con su entrada
al terreno de juego.
El técnico grana aseguró hace más de un mes que el defensa murciano
«iba acercándose cada vez más a la idea de juego que tiene el equipo»,
pero a dos partidos para acabar la primera vuelta todavía no ha sido
titular ni una vez, ni siquiera cuando Golobart y Fran Morante han
estado sancionados, ni tampoco cuando Sobregrau no estuvo al cien por
cien por problemas físicos. Tampoco Paco García ha aprovechado que
Moreno es zurdo para probarlo en el lateral izquierdo.
Triunfó en Huelva
Lo curioso en el caso de Álvaro Moreno es que Paco García lo conocía a
la perfección, y que antes de fichar por el equipo grana el jugador
habló personalmente con Fernández Romo y Víctor Alonso, y que tuvo otras
ofertas de clubes en los que podría haber tenido más protagonismo.
Además, aunque Moreno es un jugador en edad sub 23, la falta de
experiencia no es la excusa, ya que militó en las bases del Valencia y
el Atlético de Madrid, y tras jugar cedido en el Orihuela, la pasada
campaña disputó 26 partidos como titular con el Recreativo en el grupo
IV de Segunda B, acumulando 2.296 minutos, una cifra importante para un
jugador tan joven. Su falta de protagonismo en este Murcia, a pesar de
que en la primera parte de la campaña el equipo grana careció de
fortaleza y contundencia por arriba, llama la atención. El rostro
cabizbajo de Moreno tras acabar el choque en El Ejido, mientras sus
compañeros celebraban la victoria, dejaron entrever que, aunque para
este murciano era un sueño jugar en el equipo de su tierra, ahora es una
pesadilla y que, si todo sigue igual en enero, empezará a buscar
alternativas para salir en el mercado invernal, muy a su pesar.
Fuente: La Verdad
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