domingo, 8 de mayo de 2016

Aira, en la cuerda floja tras el 3-4

Tras la derrota de ayer, los consejeros del Real Murcia echaban humo. El equipo grana ha pasado de tener el liderato del grupo IV casi en el bolsillo antes del derbi frente al UCAM, a verse condenado al segundo o tercer puesto de la clasificación y a tener que jugar tres eliminatorias para ascender. Por eso, después del partido ante el Granada B, gran parte del consejo de administración se reunió en la zona noble de la Nueva Condomina para decidir si destituía al técnico leonés o seguía confiando en su trabajo.

Aunque varios consejeros, partidarios de echar al leonés, pusieron el nombre de Acciari encima de la mesa para reactivar al vestuario, otros apostaron por meditar la cuestión con más calma y esperar a que pasen unas horas para tomar esta decisión en un momento tan importante de la temporada. Además confirmaron, una vez consultado al vestuario, que la plantilla está con su actual técnico. Hoy, durante una jornada en la que los consejeros volverán a verse las caras con motivo de la carrera organizada por el club, terminarán de tomar una decisión.

Por su parte, Aira comparecía en sala de prensa tras el partido, ajeno a lo que pasaba en la zona noble del estadio: «Cualquier situación adversa nos saca del partido, nos bloquea. En la dinámica positiva de la temporada éramos capaces de reponernos en los momentos negativos», dijo el entrenador grana, cuyo equipo solo ha sumado un punto de los últimos quince posibles.

Falta de autoestima
El técnico grana destacó el factor psicológico como principal lastre del equipo: «Quiero que se vuelva a ver al Murcia que competía. No hablo solo de los resultados. Tenemos que recuperar la solvencia en las áreas, lo que nos permitió ser primeros durante un tramo largo de temporada», señaló. El próximo partido ante el Algeciras será una prueba para ver si el equipo recupera las buenas sensaciones antes del 'playoff': «Es momento de juntarnos y trabajar para llegar en las condiciones idóneas a las eliminatorias», apuntó.

Los pitos de la afición grana a su equipo y al banquillo durante el partido no pasaron desapercibidos para Aira, que no eludió la responsabilidad de la situación y reconoció que «tenemos que pedir perdón a la afición por casi toda la primera parte. Es normal su reacción hacia nosotros. Yo asumo las críticas».

Campos salió victorioso de la que fue su casa y su afición: «Mi corazón es grana en parte, pero soy un profesional y vine a ganar. De verdad, le deseo mucha suerte al Murcia».

Fuente: La Verdad

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