La noche del 6 de agosto, junto al resto de sus compañeros, no dudaron en encabezar una manifestación que partió de San Esteban con el lema 'La LFP traiciona a sus equipos y a sus aficiones'. Sujetaron la pancarta y compartieron marcha con aficionados que portaban otros mensajes como 'La LFP es una mafía'. Unas horas más tarde, el 7 de agosto, no dudaron en plantarse por sorpresa en la sede de la Liga en Madrid junto a 300 murcianistas pedían a escasos metros de donde Tebas se reunía la readmisión de los granas en Segunda División.
A Tebas no le gustó el gesto, la presencia de ambos, que viajaron junto a Aira y Toribio: «No era el momento de la sorpresa, de recibir a la gente del Real Murcia», afirmó. «No teníamos prevista la asistencia del entrenador y los capitanes del equipo. No tengo inconveniente en recibirlos, pero hoy no era el momento de la sorpresa para venir porque es un día para hacer las resoluciones y darlas a los clubes para que puedan impugnarlas», aseguró cabreado Javier Tebas el 7 de agosto.
El asunto y las acusaciones no acabaron ahí. El 15 de agosto, en plena batalla judicial con el Juzgado de lo Mercantil 7 de Madrid como escenario, el argentino no se mordió la lengua para disparar a Tebas y a su falta de tacto con el Real Murcia: «Es una vergüenza que no acate lo dicho por un juez y que monte un circo que perjudica a todos: clubes, jugadores y aficionados de Segunda. Está prohibiendo el fútbol», aseguró el de San Miguel justo después de que Javier Tebas confesara que no iba a a hacer caso al auto del juez Sánchez Magro que obligaba a la Liga, a través de una cautelarísima, a readmitir al Murcia en Segunda.
Ni afirman ni desmienten
Tebas se enfadó bastante con Acciari y también con Albiol, dos de los capitanes entonces del Real Murcia, por su comportamiento del pasado verano. Por eso, el pasado jueves y aprovechando que el equipo de Aira no entrenó por la mañana y dejó para la tarde la sesión de trabajo en el Pinatar Arena, los dos viajaron a Madrid para entablar una reunión con el jefe del fútbol español. Nadie en el vestuario sabía nada del asunto.
El encuentro estaba destinado a limar asperezas y a estabilizar una relación que había quedado muy dañada por el cruce de declaraciones en verano que puso en pie de guerra al murcianismo. Además, tampoco estaba de más conocer de primera mano el riesgo que tenía el equipo grana de sufrir la ira de un hombre que se ha convertido en el enemigo número 1 para el Murcia. Acciari y Albiol, con su visita, también querían ablandar a Tebas, que tiene la llave de la salvación grana.
Acciari no quiere entrar al trapo, y «ni confirmo ni desmiento» la reunión de Madrid. Además, el argentino dice que está «centrado solo en el fútbol, en conseguir el objetivo del equipo». Lo que es evidente es que ésta, tras la de Cobacho y Martínez Abarca, es una nueva maniobra de acercamiento a los verdugos del Real Murcia y que sin la presencia de los hermanos Samper en todo este lío, todo parece más cerca de una solución que dé estabilidad al Real Murcia en los próximos meses.
Fuente: La Verdad
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