Samper: «Estamos felices, pero no quiero que nadie lance las campanas al vuelo»

Jesús Samper estará mañana en el palco de Nueva Condomina para ver a su equipo frente al Deportivo de La Coruña. Pide ambición pero que nadie se deje llevar por la euforia del buen momento que vive el equipo de Iñaki Alonso.

¿Le ha sorprendido la reacción del equipo después de un mal inicio de temporada?
Siempre he confiado en el equipo. Creo recordar que cuando empezamos el campeonato de Liga, la plantilla estaba atacada por las bajas y la lesiones, no teníamos el equipo que habíamos concebido y que la secretaría técnica y el entrenador tenían en su mente. Pero una vez que se han ido incorporando y se ha regularizado la situación, el equipo está mostrando lo que realmente esperábamos y confiábamos que iba a ser, que es la posición en la que nos encontramos. El primer paso, como dije, era conseguir la permanencia porque teníamos que ser humildes y saber de dónde veníamos, y el segundo paso era mirar de mitad de la tabla hacia arriba, como estamos haciendo ahora.

¿No generar presión al equipo es lo que ha propiciado esta situación actual?
No, yo creo que el equipo sabía a qué se enfrentaba, y lo que no puede es pelear contra las lesiones, las bajas y, al mismo tiempo, generar el ambiente de equipo como tal. Habíamos incorporado jugadores, algunos n0 venían en plena forma y, por consiguiente, tuvieron que esperar a alcanzarla, como es el caso del Ruso García. Pero al final se han ido conjuntado todas las piezas y estamos viendo lo que yo creo que va a ser la tónica del Real Murcia, pero tampoco podemos echar las campanas al vuelo porque la Liga es muy larga.

En la calle, entre la afición, empieza a generarse euforia. ¿Le parece desmesurado?
Mientras que no se traslade al equipo, que no se ha trasladado, me parece bien que nuestros aficionados y abonados disfruten del momento, como también yo estoy disfrutando. Pero los profesionales son conscientes de que esto es muy largo y que hay partidos que se pieden sin razón o simplemente porque se ha tenido una mala tarde. En cualquier caso, que disfruten nuestros aficionados y que el equipo siga en la racha que está.

¿Cuál cree que es el mayor tesoro que tiene ahora mismo su equipo?
Es un poco todo, pero lo que yo resaltaría es la gran unidad que hay en el vestuario y alrededor del entrenador. En segundo lugar, qué duda cabe que cuando vas obteniendo resultados postivos, tú mismo te vas creciendo y te vas creyendo capaz de superar el siguiente listón. Todo eso conjugado es lo que propicia que estemos contemplando unos resultados brillantes en las últimas jornadas.

El Ruso García, un fichaje que llegó de la mano de su hermano, era un desconocido para todos. ¿También para ustedes?
Teníamos buenos informes y teníamos la confianza de su representante, persona a la que conocemos desde hace bastante tiempo en Argentina. El problema es que el jugador llevaba tiempo sin jugar porque no aceptó la renovación automática que le plantearon en su club, y eso provocó que se le apartara. Una vez que ha cogido la forma, vamos a ver un jugador muy bueno.

Nos estamos acercando a Navidad. ¿Le han pedido algo los técnicos?
No, pero tampoco me sorprendería que lo pidieran porque siempre están pidiendo, nunca están a gusto con lo que tienen. Pero hemos hecho el equipo que el secretario téncico y el entrenador han querido dentro de la realidad económica que vivimos, y a partir de ahí está funcionando correctamente. En cualquier caso, la incorporación de nuevos elementos (jugadores), no está contemplada en estos momentos.

Mañana lunes su equipo se enfrenta al Deportivo, el Madrid o Barça de la categoría. ¿Lo considera tan fiero como parece?
Es un equipo importante, que acaba de descender de Primera, que tiene como aspecto positivo que es bastante buen equipo. Sin embargo, tiene algo que le he visto en los partidos por televisión y es que tiene que acomodarse a la nueva categoría. No hay que olvidar que estamos a un punto de ellos, por lo que no hay una diferencia insalvable.

Por lo que dice, no se conforma con un empate.
Es que yo no me conformo nunca con un empate, siempre tengo la ambición de ganar. El Deportivo es un equipo que en los segundos tiempos suele bajar y nosotros, en cambio, hacemos buenos segundos tiempos.

Lo que no debe gustarle, como a casi nadie, es que el partido se juegue lunes.
No me gusta, siempre lo he dicho, pero no tenemos más remedio que acomodarnos. El lunes no es un día de fútbol, es el fin de semana, y entre semana sólo se debería jugar los miércoles cuando hay que recuperar jornadas, pero extender la jornada de viernes a lunes, no me parece bien. Debería retornarse de nuevo a los fines de semana.

¿No es el peaje que deben pagar los clubes para tener los ingresos de televisión?
Quizás sí, pero realmente tendría que darse una vuelta al asunto porque estamos echando a la gente de los estadios. Ni antes era bueno dar un solo partido ni ahora es bueno que se den todos. Debería hacerse una reflexión por parte de los clubes y ver la reorganización de los horarios.

¿No se está generando un futuro de estadios vacíos?
Desde luego. Nosotros lo estamos viendo, hemos dado un vuelco a nuestra afición, que cada vez es más joven, pero si les ponemos trabas y les hacemos ir al estadio un lunes, que salgan a las once del campo, y que al día siguiente tengan que cumplir con sus obligaciones laborales madrugando, yo creo que hay que tener mucha afición para ir al campo, porque lo normal es que un seguidor se quede en casa tan tranquilo a verlo por televisión.

No hemos hablado del derbi. ¿Qué le parece que se haya hablado más de la situación que se vivió por el comentario de Sutil que por el resultado?
Nosotros hemos disfrutado del resultado. Cuando tienes un resultado adverso, intentas distraer la atención, y eso nunca es bueno. El derbi empezó y terminó cuando el árbitro pitó el inicio y el final. Ahí se produjo un resultado favorable para el Real Murcia, del que estoy muy satisfecho, pero estaban en juego tres puntos y nada más. El partido se celebró dentro de un ambiente bastante más tranquilo que en otras ocasiones, y una vez terminado, cada uno a su casa.

¿Pero no cree que estuvo fuera de lugar el comentario de Sutil? (El jugador dijo en la celebración con las peñas «ojalá nosotros estemos el año que viene en Primera y el Cartagena en Segunda» y «me he reído en la última jugada de ellos por vosotros»).
Yo no le hago demasiado caso a eso. En primer lugar, porque el comentario no se hace en el ámbito del partido; en segundo lugar, tampoco es tan grave lo que dijo. En tercer lugar, hay que agarrrarse a algo para minimizar un resultado negativo para uno de los dos clubes, que en este caso fue para el Cartagena, que fue quien elevó el listón de esas críticas. Pero yo creo que eso ya ha pasado y no haya que darle más vueltas.

Para los aficionados el resultado tuvo sabor a venganza. ¿También lo fue para usted?
Cada partido empieza y termina cuando el árbitro pita. Me dolió hace dos años cuando perdimos en nuestra casa contra nuestro rival regional y terminó el dolor cuando seguimos jugando y se acabó con el descenso de categoría, que no fue por el hecho de perder ese partido, sino por la suma de toda una temporada. A partir de ahí, yo dije que hay que levantarse de la caída, mirar adelante y salvar la situación, como hicimos con el ascenso. Ahora nos hemos vuelto a enfrentar a nuestro rival regional y por nuestra mejor situación, nos hemos llevado los tres puntos, nada más. Eso me satisface muchísmo, pero no como desquite por lo de hace dos años, sino porque estamos en una liga nueva, en la que nos toca enfrentarnos con ellos y con otros 20 equipos más, y a partir de ahí, lo que nos interesa es ganar en todas partes, pero nada más.

Pero la afición ha recordado mucho el 0-4 del Cartagena ante el Albacete y que ayudó al descenso grana.
Sin duda y para nuestra afición tiene el mismo sabor que muchas veces tiene para mí un triunfo, pero yo no puedo manifestar públicamente quién quiero que se vaya o se quede, por ejemplo. Pero el fútbol, al final, es pasión, es defensa de tus colores y al final tú los defiendes con todas las armas que tengas a tu alcance dentro de la no violencia. Nuestros aficionados claro que disfrutaron y salieron del estadio diciendo que fue por lo que nos hicísteis hace dos años, pero si el fútbol no tuviera esa pasión, no sería tan grande como es.

Vayamos a temas económicos. ¿Está cuadrando el presupuesto?
Las cuentas ordinarias van cuadrando a pesar de que tenemos alguna deficiencia en la comercialización de la camiseta. Pero en general, hicimos un presupuesto pequeño, basado en una realidad que podría conseguirse. En cuanto al presupuesto extraordinario, que es el relativo a hacer frente al concurso de acreedores, está intocable y en diciembre haremos frente al primer pago.

¿Está preocupado por el hecho de que un club con tanto peso en la sociedad regional no tenga un patrocinador?
En primer lugar lo achaco a la crisis que se está viviendo y que afecta a todo el mundo, es una crisis brutal y hace que te pienses muy bien en qué aplicas tu dinero. Por otro lado, bien es cierto que en la Region hay empresas que están fuertes, saneadas, que podían ayudar al Real Murcia y ayudarse ellas mismas mediante su inclusión como patrocinadores. Pero eso corresponde a ellos y a su estrategia de comunicación. Nosotros hacemos todo lo posible, pero no encontramos el eco necesario.

¿Cuánto cuesta insertar la publicidad en la camiseta?
Más o menos estamos entre 250.000 y 350.000 euros la parte delantera de la camiseta, donde iba normalmente Cajamurcia.

El día de la inauguración de la sede de las peñas dijo que el próximo reto es la Ciudad Deportiva. ¿Es una quimera con la que está cayendo?
He hablado con el concejal Cascales muchas vecces y le he reiterado que si tenemos un terreno adecuado, yo me enfrento a construir una Ciudad Deportiva, aunque no al ritmo como podíamos hacerlo antes de la crisis, pero sí podríamos empezar a hacer campos para que nuestros equipos puedan entrenar.

¿Y en qué punto están?
Estamos en ello, dependiendo de Cascales para encontrar la ubicación idónea.

Hace poco conocimos que los tribunales no le han dado la razón en el contencioso de uso del estadio. ¿Eso afecta a las relaciones con el consistorio?
No, para nada. Una cosa son las diferencias que podamos tener y que hay que resolver. Yo tengo la obligación de defender los intereses del Murcia y el Ayuntamiento los que considera de la ciudadanía. Pero una cosa son las discusiones judiciales y otra que las relaciones se deterioren, que no creo que estén deterioradas.

¿Del último año y medio es el mejor momento de las relaciones Real Murcia-Ayuntamiento?
Como todas las relaciones, pasan por momentos álgidos y otros menos álgidos, pero en general, no tengo ninguna queja.

Fuente: La Opinión