El Real Murcia saca un punto de Melilla, 1-1

El Real Murcia salvó un punto en la recta final. Kike dio a los grana un empate que deja un buen sabor de boca si tenemos en cuenta como se desarrolló el encuentro. El tanto de conquense sirve al conjunto entrenado por Iñaki Alonso para mantener la racha de partidos invicto, ahora nueve, además de una distancia de dos puntos, más el gol average, con el Sevilla Atlético.

La igualada llegó gracias a la personalidad mostrada por los futbolistas, algo que le faltó al colegiado. Álvarez Pinardo no fue fiel al reglamento en la primera mitad y lo peor es que era consciente de ello. Es de humanos errar, como en la jugada del 1-0 con un más que posible fuera de juego, pero no saltarse a la torera las reglas establecidas. Porque el árbitro lo hizo y perjudicó a los grana. Y fue decisivo ya que al futbolista que debería haber expulsado fue el mismo que marcó el tanto local. El gol llegó en el 18’, instante al que Chota no tuvo que llegar. Se mostró violento en las entradas, en los choques y tocando el esférico con la mano. Todo eso antes de batir a Alberto y sólo vio la amarilla. Pero es que poco después hizo una entrada por detrás a Mario Marín y el trencilla pasó de amonestarle. Tal fue la gravedad de la acción que hasta sus compañeros le recriminaron la acción, todos menos Álvarez Pinardo.

La dureza local predominó en la primera mitad, permitida por el colegiado. El entrenador melillense fue listo, lo vio a tiempo. Estaban al borde de tener un expulsado y cambió a Dibi a la media hora tras hacer una falta escalofriante sobre Iván Amaya. De fútbol, poco. Una ocasión para Kike, que Dorronsoro desbarató y dos para los de García Tébar: el gol de Chota y otro disparo de éste al larguero.

Tras el descanso, la dinámica cambió. Los locales perdieron fuelle, no les quedaba ni para dar patadas. Se atrincheraron en la defensa y dejaron el balón al cuadro de Iñaki Alonso, que no desistía en buscar la portería rival. El técnico vasco comenzó a mover el banquillo con cambios ofensivos, como fueron los de Cañadas y Aquino por Cámara y Albiol. Era cuestión de tiempo el empate. Chando lo tuvo pero una mano mágica del portero local lo evitó. No fue a la primera, pero sí a la segunda, por medio de Kike. El de Motilla de Palancar peinó un saque de esquina botado por Cañadas y mandó el esférico a la red.

Los últimos minutos no tuvieron control, uno y otro salían a la contra sin orden. El primero que tuvo la victoria fue el Real Murcia en una acción en la que Pedro, en excelente posición, decidió pasar en vez de tirar a puerta. La defensa despejó sin contemplaciones. La oportunidad local vino en un contragolpe de Roldán cuyo pase atrás envió fuera Carlos Ruiz.

U.D. Melilla: Dorronsoro, Llamas (Ramos, 78'), Herreros, Mahaman, Rodríguez, Dibi (Azrack, 33'), Enguix, Bravo (Amarito, 65'), Carlos Ruiz, Guille Roldán y Chota.
Real Murcia: Alberto Cifuentes, Ander Gago, Luciano, Iván Amaya, Mario Marín, Aguilera, Cámara (Cañadas, 54'), Albiol (Aquino, 59'), Pedro, Kike (Urzaiz, 78') y Chando.
Goles: 1-0. Chota (18'). 1-1. Kike (75').
Árbitro: Álvarez Pinardo. Amonestó a los locales Chota, Dibi y Herreros. También a los grana Gago y Amaya. Acta del partido

Fuente: Real Murcia