El entrenador del Real Murcia, Iñaki Alonso, se ha mostrado hoy autocrítico al declarar que a su equipo "le falta regularidad en el juego", y ha asumido que "a veces ha dado muestras de no estar suficientemente activado, pero la mayoría de las veces sale enchufado al campo".
El técnico vasco ha comparecido en rueda de prensa después del entrenamiento celebrado en Cobatillas, donde ha seguido preparando el partido del próximo domingo ante el Lucena cordobés, que tendrá lugar a las 17 horas en el estadio Nueva Condomina.
Al referirse a su próximo rival en la decimoquinta jornada de la Liga en el Grupo IV de Segunda División B, ha comentado que "es un equipo que tiene jugadores con oficio, que saben jugar al fútbol y tener el balón, y que son buenos para la categoría".
Además, ha destacado del cuadro andaluz que es "muy peligroso en jugadas de estrategia, por lo que el Murcia deberá tener el balón, atacar, no generar acciones a balón parado en contra y alejar del área a Pineda, que lleva marcados bastantes goles. Si se hace eso bien, el Lucena tendrá menos posibilidades de sorprender".
Alonso ha señalado que está "alucinado" por lo que en ocasiones se comenta de lo hecho por su equipo, porque en el partido ante el San Roque "hubo gente que dijo que el Murcia estuvo detrás del balón, cuando la posesión fue muy superior a la del rival".
"El equipo ha demostrado que es capaz de competir en cualquier sitio, pero el problema es que hay que gente que dice que el Murcia se tiene que pasear en Segunda B, y si pensamos así, estamos confundidos", ha añadido.
Para el entrenador de Durango haber ganado el pasado domingo en el campo del Écija por 0-2 refuerza al Murcia "porque siempre que se gana un partido hay un plus de confianza y motivación, y ahora lo que hay que hacer es volver a ganar en casa".
Para Alonso, "la Segunda B es una categoría compleja en la que cada equipo tiene tres o cuatro jugadores interesantes".
En todo caso, ha valorado la respuesta del cuadro grana, que es el segundo clasificado. "Este equipo descendió la pasada temporada, que es algo traumático, tiene un entrenador y un montón de jugadores nuevos, y no lo está haciendo tan mal", ha comentado.
"Somos exigentes, y además de ganar -ha concluido-, queremos hacerlo jugando mejor, pero la gente tiene que estar tranquila y darle valor a lo que está haciendo bien, que es mucho, aunque el objetivo sigue siendo mejorar y darle satisfacciones al público sin perder la perspectiva y saber que habrá momentos adversos".
Fuente: EFE
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