Alonso ha lamentado que por tercera vez consecutiva tenga que buscar la clasificación fuera de casa.
El Murcia, conjunto del grupo cuarto de Segunda B, consiguió anoche su acceso a la siguiente fase de este torneo al superar en la tanda de penaltis al Oviedo, tras empatar a dos en el estadio Carlos Tartiere y tener que disputar una prórroga.
Lo mismo hizo frente al Puertollano de Ciudad Real en la primera eliminatoria, y entonces también salió triunfador en la tanda de penaltis, después de una prórroga que acabó con empate sin goles.
El cuadro grana está teniendo un buen comienzo de temporada, tras el varapalo que supuso su descenso de categoría en la campaña anterior, y en su debut en la Liga ganó fuera de casa por 1-3 al Sevilla Atlético.
Además, es el único representante murciano en la Copa, ya que ayer quedaron eliminados el Cartagena, que perdió por 1-3 ante el Rayo Vallecano madrileño, y el Jumilla, que cayó por 0-1 frente al Melilla.
Una trayectoria similar lleva su rival copero, pues el Sant Andreu, equipo catalán que milita en el grupo tercero de Segunda B, y que el curso pasado disputó las eliminatorias de ascenso a Segunda, ganó en la primera jornada liguera al Alcoyano alicantino por 2-0, y en la segunda ronda eliminó al CD Alcalá por 1-3.
El encuentro entre murcianos y catalanes, que tendrá lugar el miércoles en el estadio Narcís Sala en hora aún por determinar, es una nueva prueba de fuego para los de Iñaki Alonso, que ha recordado que "la pasada temporada estuvo a punto de ascender a Segunda y es un club cuyo presidente, Joan Gaspart, está confeccionando plantillas con grandes presupuestos para llegar a Segunda".
Sobre el hecho de que la eliminatoria vuelva a disputarse fuera de casa, el técnico vasco ha apuntado: "Llevamos muchos kilómetros, y eso está siendo un inconveniente para nosotros".Fuente: EFE
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