La situación de los jugadores descartados por el Real Murcia comienza a ser agobiante. No cuentan para el próximo proyecto y el club les busca salida sin conseguirlo. Por ahora, no hay ningún equipo dispuesto a pagar fichas desproporcionadas por jugadores con un rendimiento normal en algunos casos y malo en otros.El dueño del Real Murcia es consciente de esta situación, y de que la viabilidad del Real Murcia, inmerso en el concurso de acreedores, pasa por aligerar gastos. A Samper se le pasan pocas por alto y ya tiene preparado una solución alternativa en caso de que los siete descartes se agarren a su taquilla en Nueva Condomina.
La solución pasa por plantear un expediente de regulación de empleo ante la administración laboral para despedir de forma procedente a los siete jugadores que no cuentan para Campos. Los requisitos los cumple, según aseguran fuentes del club, que pueden ver en esta noticia una medida de presión.
Necesita que los trabajadores que la empresa quiere despedir superen el 10% sobre el total de los empleados. Este requisito lo cumple puesto que el Real Murcia supera por poco los 50 trabajadores y los siete descartados son más del 10%. Además, trabajadores de otros departamentos también podrían entrar en este expediente. Después llegará el momento de las negociaciones en las que también entran en juego los representantes sindicales. Si se llega a un acuerdo, el proceso habrá acabado, pero sino lo hay, el Real Murcia tendrá que presentar ante la consejería de Trabajo y Educación un informe en el que demuestre que el expediente está planteado justamente atendiendo a uno de estos tres motivos: económicos, de producción u organizativos. Si el ERE es aceptado por la administración, Samper podrá despedir a los jugadores pagándoles sólo 20 días de indemnización por año de trabajo, mientras que si no es aceptado, tendrá que readmitirlos. En caso de que se produzca un despido improcedente, Samper deberá indemnizarlos.
Fuente: La Verdad
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