viernes, 23 de marzo de 2018

La doble vía de Raúl Moro

El actual consejero y expresidente del Real Murcia, Raúl Moro Martín, puso el club en estado de máxima tensión cuando la semana pasada anunció que había revocado los poderes que concedió al empresario mexicano Mauricio García De la Vega después de que este hubiera comunicado ante notario su intención de ejecutar una de las cláusulas del contrato privado que suscribió con Moro a principios de diciembre de 2017. En concreto, puso en marcha el mecanismo previsto para convertirse en el nuevo dueño de la entidad. La jugada no la encajó bien el empresario de Extremadura y decidió pasar al ataque.

Ante las sospechas de los planes que podía estar urdiendo Raúl Moro, Mauricio García paralizó el pago de la nómina de febrero a los jugadores, abono que acabó realizando la empresa de Orihuela Gálvez Brothers. Así lo anunció el expresidente pimentonero. Incluso fue más allá y advirtió que este nuevo inversor tenía capacidad e intención para asumir el pago de los sueldos que están pendientes para acabar la temporada.

Sin embargo, Moro no tiene intención de jugarse sus opciones a una carta y está explorando otras alternativas. El inversor norteamericano Bryan Cohen ha mostrado interés por entrar en el Real Murcia como parte de los diversos proyectos que quiere desempeñar en España este empresario del mundo de la comunicación. Su persona de confianza en territorio español es Domingo Egea, un emprendedor del mundo de las 'startups' que posibilitó un encuentro con Deseado Flores cuando el manchego todavía era consejero delegado del club grana. La cita tuvo lugar en la Nueva Condomina, a la conclusión del partido que los pimentoneros disputaron contra el Córdoba B, el 25 de febrero.

En los últimos días, Moro ha retomado el contacto con Domingo Egea. Ya tuvo intercambio de impresiones con el entorno de Bryan Cohen a principios de marzo, antes de que Mauricio García ejecutara la opción de compra del Murcia, que asegura que aparece reflejada en el contrato que firmó con Moro. El empresario extremeño ha sondeado por medio de Egea la capacidad económica que puede tener Bryan Cohen y si su intención de desembarcar en el conjunto murcianista va en serio. Para ponerlo a prueba, Moro ha puesto encima de la mesa el número de una cuenta corriente para que el inversor norteamericano ingrese una cantidad próxima a los 450.000 euros, cantidad necesaria para abonar las 5 nóminas que la primera plantilla del Murcia tendrá que cobrar de aquí al fin del curso.

Información para el CSD

De esta manera, y a pesar de que Moro apostó públicamente por la llegada de Gálvez Brothers como inversor, el extremeño también está sondeando otras alternativas, como la que representa Bryan Cohen. En cualquier caso, el papel que va a desempeñar el Consejo Superior de Deportes (CSD) a la hora de fijar quién es el dueño del Real Murcia es fundamental. A este respecto, desde el Consejo de Administración del club se ha remitido a este organismo documentación que acredita que la empresa Corporación Empresarial Augusta, entidad con domicilio social en Sevilla y de la que Raúl Moro es administrador único, según el Registro Mercantil, es la propietaria del 84,2% de las acciones del Murcia, después del acuerdo alcanzado en el verano de 2017 entre el empresario extremeño y Gonzalo Samper, hijo del difunto Jesús, exdueño de los granas.

El CSD solicitó al Murcia que actualizara su situación accionarial porque solo tenía constancia de que Moro era el propietario del 11,2% de las acciones del club. El mismo organismo también admitió que había recibido la solicitud de Mauricio García y que estudiaría su documentación aportada cuando el Consejo del Murcia se pronunciara, algo que, según el entorno de Moro, ya ha hecho. De esta manera, los consejeros granas habrán tomado parte por el empresario extremeño en la pugna que tiene con De la Vega. Lo mismo sucedió cuando en su reunión del viernes pasado acordaron despedir a Pedro Gómez Carmona, mano derecha de García de la Vega en el Murcia.

Gálvez Brothers también ha solicitado permiso al CSD para adquirir el paquete accionarial de Moro, a pesar de que la semana pasada esta empresa, que había abonado las nóminas de febrero a los jugadores, dijo que «no tenía motivación mercantil» ni intención de «asumir la gestión del club».
El papel del CSD en este asunto viene marcada por el artículo 16.1 del Real Decreto 1251/1999, que regula las sociedades anónimas deportivas, como es el Murcia, y por el artículo 22.2 de la Ley del Deporte. Así lo explicó a 'La Verdad' uno de los mayores expertos en materia de Derecho Deportivo que existen en la Región, como es el abogado Francisco Idáñez, abonado del Real Murcia.

Sin denuncias de momento

Él mismo matiza que la legislación no recoge cómo debe actuar el CSD ante la presencia de dos solicitudes para realizar la misma operación, tal y como sucede con Icon STAR (empresa de Mauricio García) y Gálvez Brothers. En opinión de Francisco Idáñez, «el pleito está servido», a juzgar por lo alejadas que están las posturas entre De la Vega y Moro. Hasta el momento, no hay rastro en los juzgados de la contienda entre el mexicano y el extremeño, a pesar de que este último ha deslizado en su entorno que esta semana iba a interponer una demanda civil. La futura decisión que adopte el CSD se podrá recurrir por la vía contencioso-administrativa.

Fuente: La Verdad

No hay comentarios:

Publicar un comentario