El planteamiento hoy en día es muy diferente al de hace un mes, cuando la ACB se paró por la disputa de la Copa del Rey. En ese momento el UCAM estaba hundido y Katsikaris repetía una y otra vez que «necesitamos trabajar, entrenar duro». Pero el parón de esta jornada no se ha acogido tan bien como el anterior en el seno de la plantilla, consciente de que está en un momento dulce, apropiado para seguir creciendo en una temporada que al final se va a antojar corta, ya que de haber movido ficha el club antes con el cambio de entrenador, el equipo murciano podría estar ahora mismo luchando por entrar en el play off por el título por segunda campaña consecutiva en su historia. Ahora, con 10 victorias y un margen de 3 sobre los puestos de descenso, el panorama se contempla de otra manera, con el objetivo de ver hasta dónde puede llegar un equipo totalmente revitalizado.
Tras descansar este fin de semana, al equipo de Fotis Katsikaris le quedarán siete encuentros más para finalizar la competición. El domingo 9 de abril visitará al Movistar Estudiantes (12.30 horas), una pista donde ganó la pasada campaña con un partido sobresaliente de Facundo Campazzo, que dio 15 asistencias.
Posteriormente, el último domingo de Semana Santa, el 16 de abril, recibirá al Montakit Fuenlabrada (12.30 horas), un rival que también ha tenido esta campaña en la Eurocup, al que ganó en el Palacio.
Una semana después, el sábado 22 o el domingo 23, el UCAM visitará al Río Natura Monbus Obradoiro, para cerrar abril recibieron en Murcia al Tecnyconta Zaragoza de Luis Guil.
El sprint final será una montaña rusa para los murcianistas, que el 7 de mayo visitarán al Herbalife Gran Canaria en Las Palmas, para una semana después jugar el último encuentro en casa de la temporada regular frente al Unicaja Málaga (11 de mayo). El curso concluirá el 14 de mayo en la Fonteta de Valencia.
Fuente: La Opinión
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