Paco García: «No insulté al árbitro»

El hombre que marcó las diferencias en el partido de ayer sobre el terreno de juego fue Borjas Martín. El delantero canario se estrenó como goleador con la camiseta grana, tras un mes y medio de competición, y pudo quitarse de encima esa ansiedad que tenía por ver puerta. «Esto es así, cuando te entran uno, te entran todos y contento por ayudar al equipo a conseguir esta victoria que necesitábamos porque veníamos de una racha un poco negativa», aseguró tras el partido.

Con ese tanto que abrió el marcador y su cuenta particular «te liberas un poco al conseguir ese primer gol, te anima y se te pasan muchas cosas por la cabeza pero, sobre todo, disfrutar y seguir trabajando para lograr la victoria». El jugador reconoció que la adaptación de la plantilla, tras tanto fichaje, hará que tenga que pasar tiempo para que se vea la mejor versión del equipo. Por el momento ya se vislumbra una buena combinación entre Titi, que le dio los dos pases de gol, y el delantero canario, que los aprovechó.

El '9' grana venía tocado con un golpe en las costillas de la semana pasada ante el Linense y en la primera parte se resintió pero pudo aguantar hasta el final, pese a que «no podía ni hablar, ni coger mucho aire porque me dolía bastante», pero siguió peleando porque ya no quedaban más cambios y temía que pudiese llegar el empate. Por su parte, Paco García reconoció que tras el descanso temía el potencial del conjunto nazarí, porque «es el equipo que más nos puede castigar por su forma de jugar, basada al contraataque, con gente rapidísima y un potencial ofensivo muy importante». Por eso retrasó las líneas y le entregó el balón al rival para buscarles las cosquillas a la contra. «Buscábamos que los centrales se precipitasen y tuviesen fallos, como así ha sido con el 2-0, para luego intentar aprovechar sus espaldas», reconoció el murciano.

Una sanción en camino
La polémica llegó en el último minuto del tiempo reglamentario con una dura entrada sobre París Adot justo delante del banquillo grana. El colegiado dejó sin sanción al agresor y se llevó por delante a Diego Benito y Paco García, que fueron expulsados por sus quejas y no podrán estar, al menos en el banquillo, en Huelva la próxima semana. «Hemos protestado la acción de París, pero más que eso ha sido que el juez de línea ha levantado el banderín dos veces y lo ha bajado en dos jugadas que eran fuera de juego claros a nuestro favor», explicó García. «No hemos insultado ni hemos faltado al respeto y no creo que nos caiga más de un partido», aseguró tras el choque.

Por su parte, el colegiado puso en el acta que el técnico fue expulsado por «salir del área técnica y situarse junto a mi persona con los brazos en alto, gritándome a viva voz, a la vez que me sujetó el brazo izquierdo en señal de disconformidad con una de mis decisiones».

Fuente: La Verdad