Sobre todo porque hay buena sintonía de Abarca con la directiva del Jumilla, un equipo en el que desembarcó capital de este país asiático la pasada temporada, por medio de Tang Hui y Xi Liang, dos empresarios de la comunicación que han dado estabilidad y seriedad financiera a una entidad que hasta su llegada fue una casa de locos. Primero pusieron 200.000 euros para pagar las deudas del año pasado y ahora llevan al club al día. Entre ellos y el Real Murcia ha surgido una relación muy singular, gracias al madrileño Rubén Iglesias, que puede ir a más con el paso de los meses.
El punto de partida fue el desembolso de 20.000 euros por parte de la directiva jumillana para ayudar al Real Murcia, coincidiendo con el llamamiento que Martínez Abarca efectuó a las empresas de la Región para abordar pagos ineludibles y que el club grana no se viera abocado a la liquidación. Además de Tomás Fuertes, Estrella de Levante, el Grupo Orenes, Albarracín y el notario Francisco Tornel, los dueños del Jumilla pagaron de su bolsillo una cantidad no excesivamente significativa pero vital para la entidad grana.
Fue después, según parece, cuando el club jumillano se fijó en algo que el Murcia tiene y que puede servir para devolver el favor el 6 de noviembre al club presidido por Iglesias. Se trata de la Nueva Condomina, un estadio donde la directiva jumillana pretende celebrar su partido contra el Lorca de Xu Genbao, otro equipo que tiene un propietario de nacionalidad china. Los propietarios del club del Altiplano quieren que se dispute a las doce del mediodía para poder televisarlo para China, siempre con fines comerciales y estratégicos.
El motivo de celebrar este partido en Murcia es el de mejorar la imagen que puede dar el estadio ubicado en la capital de la Región, mucho más llamativo que el Municipal de La Hoya, un polideportivo con pista de atletismo menos preparado para acoger partidos de fútbol. El choque entre jumillanos y lorquinos coincide en fecha con el Murcia-Marbella, aunque el club grana podría pasar su partido al sábado 5 de noviembre, ya que está interesado en abrir esta puerta, aunque sea de forma indirecta, que se acaba de abrir. Todo hace indicar que los 20.000 euros puestos por uno de los dirigentes del club jumillano no son el pago para jugar en la Nueva Condomina, aunque todo hace indicar que sí hay una relación causa-efecto.
El Jumilla y el Murcia parece, según fuentes cercanas a ambos clubes, que ya se han puesto de acuerdo y solo falta el visto bueno de la Federación Murciana. La normativa dice que para pedir jugar un partido de Liga en un campo diferente al designado a principio de temporada por el equipo local, basta con un certificado que asegure que en el campo que debe acoger el partido existe algún problema. La solicitud debe designar un nuevo recinto que no esté a más de 40 kilómetros de donde se debería jugar, o que esté ubicado en la ruta que debería tomar el equipo visitante en su desplazamiento hacia el campo inicialmente designado. Ya sea desde el Pinatar Arena o desde Lorca, el equipo de Genbao no debería poner ningún problema, ya que desde ambas localidades hay que pasar por Murcia para ir a Jumilla.
En todo caso, el equipo que puede salir más perjudicado por este cambio de estadio sería el propio Jumilla. Los pupilos de Pichi Lucas saben que una de sus principales armas cuando juegan como local es que su terreno de juego muy estrecho y en él se ahogan los equipos grandes.
Beneficios colaterales
La maniobra sí puede ser beneficiosa, doblemente, para el Real Murcia, según algunos consejeros. Por un lado, en este partido retransmitido la imagen que llegue al país asiático será la de un estadio preparado para el fútbol profesional en el que juega el Real Murcia, un equipo cargado de historia. Además, los inversores que han desembarcado en el Jumilla quieren fletar un jet privado con empresarios de su país de origen para presenciar dicho choque en directo, oportunidad que también podrían aprovechar los rectores granas para iniciar contactos con futuros inversores. Y no solo eso, el club grana también piensa que traer a jóvenes jugadores chinos a formarse a la cantera del Murcia puede dejarles un buen pellizco para sacar a flote parte del presupuesto del club mientras no ascienda de categoría.
Cabe recordar que desde el año pasado el fútbol es asignatura obligada en los colegios chinos, los gobiernos regionales y ayuntamientos de aquel país subvencionan a las jóvenes promesas que viajan a Europa para aprender. La fiebre por este deporte sube en un país de 1.357 millones de habitantes. En los últimos años hay un desembarco de empresas chinas en el fútbol español El caso del Atlético de Madrid, del Granada y del Celta, que va a ser adquirido por cerca de 100 millones, son los últimos ejemplos.
Fuente: La Verdad
No hay comentarios:
Publicar un comentario